Los 7 niños empresarios más jóvenes del mundo

Todos tuvimos sueños de niños, pero no todos apostamos por nuestra imaginación para crear grandes empresas desde pequeños. Hoy 30 de Abril te decimos quiénes son los más pequeños en el mundo de los negocios:

Mikaila Ulmer

A los 4 años comenzó su negocio de limonadas caseras usando la receta secreta de su abuela. Llamó Bee Sweet a su limonada y se volvió tan exitosa que firmó un contrato con la cadena de supermercados Whole Foods para vender su producto en 55 tiendas de Estados Unidos. Su éxito es tal que incluso Barack Obama se ha declarado fanático de la bebida.

Henry Patterson

Durante el año 2011 fue considerado el empresario más joven del mundo. A sus 7 años fundó su primer negocio que consistía en la venta de bolsas de estiércol. Posteriormente comenzó a vender productos usados por eBay y un par de años después creó "No antes del té", donde se dedicaba a la venta de dulces por internet. Patterson creó incluso los logos de sus marcas.

Brandon y Spencer Whale

Brandon y Spencer Whale, son dos hermanos que son solo 6 y 9 años, lograron emprender creando productos para hacer más alegre la estancia de niños que se encuentran en hospitales. Tuvieron la idea de crear un dispositivo llamado “Needle Beetle”, que es una funda con forma de escarabajo que oculta las inyecciones a vista de los niños.Se dice que la idea nació al ver que otros pequeños, como él, lloraban y sentían pánico al ver las jeringas con las que serían inyectados. Su producto se usa ya en algunos hospitales de Estados Unidos. Además crearon el “KidKare Riding Car”, que es un coche con pedales para transportar suero, sondas, gasas o cualquier otro producto médico. Ellos plantean que en vez de una silla de ruedas se use este cochecito para que los niños se diviertan mientras son tratados en el hospital. Han vendido ya la patente y el producto es uno de los juguetes más populares en hospitales estadunidenses.

Anna Tselevich

Tras pasar horas jugando con la caja del refrigerador nuevo de sus padres, Anna se dio cuenta de que siempre es más divertido jugar con la caja, la cual convirtió en una casa para jugar con sus muñecas. A los 12 años creó Box-O-Mania, empresa en la que vende cajas de plástico, con las cuales los pequeños pueden armar una casa de juegos. Incluso Marvel firmó un acuerdo para que ella pudiera usar los personajes en algunos de sus productos.

Leanna Archer

Esta pequeña fundó su empresa Leanna’s Hair a los 9 años de edad. La línea de productos para el cabello que utiliza una vieja receta familiar y en la actualidad se vende en gran parte de Estados Unidos. La empresa gana más de 200 mil dólares al año. Además, Leanna fundó la Leanna Archer Education Foundation, una organización enfocada en proveer mejores oportunidades para los niños más necesitados en Haití. Con 13 años, Leanna se convirtió en la persona más joven en tocar la campana durante una jornada en Wall Street.

Robert Nay

A los 14 años creó una aplicación llamada Bubble Ball, la cual tuvo más de un millón de descargas en sus primeras dos semanas. Robert construyó por completo el juego después realizar una compleja investigación y escribir alrededor de cuatro mil líneas de código individuales. El juego fue tan popular que llegó a ser número uno de la Apple Store destronando a Angry Birds.actualmente, Nay es el CEO Nay Games, su propia compañía.

Maddie Bradshaw

Desde los 13 años esta niña vende más de 50 mil collares y pulseras al mes, bajo el nombre de Snap Caps, que distribuye en almacenes de Estados Unidos y Canadá. Su idea comenzó en la escuela cuando adornó su casillero con la tapa de una botella usada donde dibujó el retrato abstracto de Albert Einstein en su interior, lo fijó con un imán y lo rellenó con resina.

¿Qué opinan? Seguro que si hubiéramos seguido nuestros impulsos de niños seríamos todos unos empresarios. ¡Nunca es tarde! ¡Inicia hoy!